Hoy hemos decidido comer fuera y como todas somos fumadoras no logramos ponernos de acuerdo qué terraza vamos a iluminar con nuestra presencia, lo que puede llevarnos a que acabemos quedándonos en casa.
Tuli, quiere una terraza en el lado Llobregat del Paseo de Gracia porque pagan 723 euros al mes por el mismo espacio que la de enfrente (lado Besós) que sólo paga 434 y eso les obliga, según ella, a que las sillas 
sean más cómodas. Como plantas quiere que sean sólo truanas, no otro tipo de "verdura" que le provocan una seria alergia visual.
sean más cómodas. Como plantas quiere que sean sólo truanas, no otro tipo de "verdura" que le provocan una seria alergia visual.Cris, que piensa ponerse un conjunto primaveral que acaba de comprarse, exige que los parasoles sean de tela blanca o tonos pastel para que su conjunto destaque más; lo que nos obliga a ir al Eixample o a Horta Guinardó y a lo que Tuli se opone rotundamente.
Yo me niego a salir de Sarría/Sant Gervasi por comodidad y porque los parasoles son -obligatoriamente- de lona color crema y cuadrados, lo que estéticamente hace la terraza mucho más apetecible. La comida también..
Las otras dos andan agarradas del moño porque una quiere calle A -primera categoría- con parasoles azules -imposible salvo en La Guineueta- y la otra, más progre, quiere calle clase D con la terraza rodeada de Ficus Benjamina lo que nos delimita a la zona de Gracia, donde ese es el único árbol que se permite siempre que no sobrepasa el 1,5 m. de altura. .
Ante esta prespectiva derivada de la estúpida Ley Antitabaco y de las 1001 diferentes normativas del Ayuntamiento de Barcelona, que nunca mejor dicho va por barrios o distritos, me parece que me quedo en mi casa donde tengo un ficus benjamina, no pertenezco al lado Besós ni al Llobregat por ser una calle transversal y paso de parasoles que en mi salón quedarían muy mal.
Como está visto que no nos vamos a poner de acuerdo, mejor esperar a que den el permiso a las 567 nuevas solicitudes presentadas por bares y restaurantes de Barcelona ya que las 3.583 actuales no cumplen nuestras prespectivas globales.
Como nos complican la vida estos políticos, ya ni salir a comer tranquilo puedes... ¡Que asco!
¿Invento o es verdad que las normativas en Barcelonas varian según los barrios?
ResponderEliminarMe cuenta creerlo aunque de estos políticos todo, todito, se puede esperar.
Juan
ResponderEliminarVerdadero, verdadero
Y lo que escribe Dovel es verdad. Ahora si vamos a comer, como lo hemos de hacer en una terraza, llegan las discusiones.
Que si da el so o no, que si en un barrio o en otro, que si el conjunto que me pongo queda bien con los parasoles, etc. etc.
Total cada una come en su casa.
Muy bueno el juego de normativas por distritos unido a vuestras preferencias en “verduras” y parasoles. Jejejejeje. ¡Eres el colmo!
ResponderEliminarNo sé si son todas reales o hay alguna de cosecha propia pero has dejado a Hereu a caer de un burro.
Por otro lado veo que habéis puesto vuestras fotos actuales, pero así no valen. ¡Tienen que ser de frente! Jejejejeje.
No sé por qué, esta visto que hoy no se nada, pero a ti siempre te he imaginado rubia. ¿Me equivoco, Dovel?... Una tigresa rubia enleopardada, vaya vaya... jajajajaja.
Saludos especiales y no te enfades con mis bromas.
Cris, si tanto problemas tenéis con los parasoles venid a comer a mi casa y os pongo el color que os dé la gana. Promesa de buen jotero. jejejejeje
¿Y qué hay para comer?
ResponderEliminarNo me lo puedo creer, ¿cómo aguantan eso los comerciantes o restauranteros que ofrecen sus servicios? Lograr que las autoridades unifiquen criterios y normativas sobre horario, imagen, e impuestos por espacios... eso es lo que se debería hacer.
ResponderEliminarYo solo les pido que las obliguen a poner ceniceros en las mesas, y a limpiar cuando han recogido, que dejan las aceras hechas unos zorros.
ResponderEliminar¡Por favor, MÁS TERRAZAS! En ciudades como Berlín, París, Amsterdam (con lo pequeñas que son las calles al lado de los canales) están llenas de terrazas que embellecen la ciudad y hacen disfrutar a la gente.
ResponderEliminarAquí ponemos bancos en las aceras mirando a la Meridiana y a los coches para respirar bien la polución (salida metro SAGRERA) y, encima, no nos quejamos. Somos unos catetos.
Si hay comidita... ¡Yo también voy, Jotero!!!!
ResponderEliminarNecesitarás mucha ayuda para controlar a estas tres brujas que encima se han puesto pelucas para hacerse las fotos. Pá mi que son calvas... jajajajajaja
Naturalmente que tendrán que limpiar y ya lo hacen pero ¿quién tira las colillas al suelo? ¿Además qué hacemos con el ruido que provocan esas terrazas a los vecinos, de eso no decimos nada?...
ResponderEliminarEs que yo tengo una abajo de mi casa y sé de lo que hablo.
Esos son los problemas de la mala educación y los "dolores de cabeza" de la España socialista.
ResponderEliminarHabrá que ampliar las aceras y quitar espacio a los vehiculos rodados. Porque terrazas, peatones y bicicletas al final no cabremos.
ResponderEliminarEl domingo vi un bar con una miniterraza, dos mesas, en una calle estrecha, con tres containers a rebosar a 2 metros. ¡Que estilazo, con esos servilleteros de plástico rojo y el cenicero de propaganda!...
ResponderEliminarLas sillas eran las clasicas, esas plateadas, que cuando las mueves para sentarte (o caerte) parecen una persiana sin engrasar, vamos una maravilla.
Aquí, salvo en el paseo, no deben haber normativas.