Si el pasado 1 de Septiembre -antes de la Diada y de todo lo acontecido después- ponía a caer de un burro, en este blog, al Coronel Francisco Alaman, quién abogaba por la intervención militar de Catalunya; hoy tengo que hacer lo propio, aunque este ex-militar esté a favor de la consulta del pueblo catalán, con el Coronel Martinez Iglesias.

Este coronel fue expulsado del ejército en 1990, tras haber pasado cinco meses en la prisión militar de Alcalá de Henares por acumulación de sanciones disciplinarias, iniciadas en noviembre de 1989, debidas a sus declaraciones a diversos medios de comunicación, en las que se mostraba partidario de un ejército profesional.
Pues, este ex-coronel publicó, el pasado lunes, un artículo en el diario "Canarias semanal" en el que dice, entre otras muchas cosas: "... ¿qué clase de democracia estamos viviendo desde hace 30 años? No entiendo que se monte la marimorena política porque el Govern catalán quiera consultar sobre sus aspiraciones políticas futuras. No puede haber consultas ilegales a la ciudadanía [...] ya que todas, absolutamente todas, están amparadas por la Constitución española. El mentado artículo 149.1 de la Constitución española -al que todos recurren para asegurar que la consulta soberanista es ilegal- solo se refiere a "consultas populares por vía de referendo, algo que, en Catalunya no se pretende hacer, porque un referendo ratifica lo que previamente han votado ya sus representantes, cosa que, recuerda, no ha ocurrido en Catalunya."
Pues mire Ud., Sr. Coronel, aunque pueda tener razón y esté defendiendo la libertad del pueblo catalán a decidir sobre nuestro futuro; como coronel ó ex-coronel, mejor se queda Ud. callado; que suficiente berenjenal tenemos montado y lo que menos necesitamos, TODOS, son militares a favor o en contra de la LIBRE Y LEGAL voz de un pueblo.
Una voz que, aunque algunos quieran impedirlo, se dejará oír alta, clara y LEGALMENTE cuando corresponda; ya sea en el 2014, 2016 o en el 2020, pero de que se producirá no tenga la menor duda porque la entendida Democracia -con mayúsculas- está por encima de cualquier Constitución de 1912, de 1978 o de la posible volatización del 18,68 del PIB nacional. Mientras llega ese momento, calladitos están más guapos. De todas formas, muchas gracias.
Con el PP-PSOE, adláteres, sucedáneos y "cavernarios" nos bastamos para remover el cocido hasta que se pudra, se consuma el caldo o se vuelque la olla.