Noticias como esta no sólo me ponen de mala gaita si no que hacen nacer un mí un irrefrenable deseo de empezar a patear moros hasta la frontera.
Un profesor de un instituto de La Línea (Cádiz) ha sido denunciado por la familia de un alumno musulmán que se sintió ofendido cuando el maestro explicó en una clase que el clima frío de la localidad granadina de Trevélez favorecía la curación de jamones. ¡Tócate los bemoles!
El alumno fundamentalista se sintió tan ofendido por la palabra "jamones" que no dudó en levantar la mano pidiendo al profesor infiel que no citara ese producto porque, debido a su religión, se sentía ofendido.
El profesor le contestó que él, en su función docente, podía hablar en clase de lo que estimara oportuno.
El futuro integrista de la Yihad islámica contó a su familia lo ocurrido en clase y ésta decidió denunciar en la comisaría al profesor por maltrato psicológico dentro de un contexto de xenofobia y racismo. ¡Menudo morro gastan!
El profesor le contestó que él, en su función docente, podía hablar en clase de lo que estimara oportuno.
El futuro integrista de la Yihad islámica contó a su familia lo ocurrido en clase y ésta decidió denunciar en la comisaría al profesor por maltrato psicológico dentro de un contexto de xenofobia y racismo. ¡Menudo morro gastan!
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Lo tenemos claro, o frenamos a estos radicales que no están por integrase o este país, y también Europa, se van a la puñetera mierda.
¿Cúando les haremos entender que nuestra civilización y nuestra forma de vida es la que manda y que si no les gusta, o les ofende, que se queden en su "eme" de incultura y de país?... Con tantos miramientos y tanto miedo a que nos tachen de racistas, ya estamos llegado tarde.
Lo que es indignante e indecente no es que los padres del chaval hayan puesto una denuncia, de esa gente se puede esperar todo, lo verdaderamente insoportable es que la justicia la haya aceptado a trámite.
ResponderEliminarEstá claro a que ha venido esta familia: a tocar los cojones, como todas las de su misma ralea.
ResponderEliminarYa que no se adaptan ni quieren cumplir las leyes españolas y quieren imponer las suyas en España, deberían ser expulsados inmediatamente. Esto sí sería un mensaje claro para los extranjeros que se han tomado este país como su cortijo particular.
Quien aporte y cumpla las leyes adelante, quien haya venido a beneficiarse y a imponer sus leyes creando problemas donde jamás existieron... ¡puerta inmediatamente!
Seguro que ni pagaban el colegio de ese burraco de hijo. ¡Todos a chupar lo que pueden y a tocar lo que no deben!!!!
Hasta los mismísimos estoy de tanto moro y tanto panchito. ¿Qué santísimos cojones se han creído?????....................
Buenos días a todos.
Lo lógico hubiera sido:
ResponderEliminar- Primero, ni siquiera admitir a trámite la denuncia.
- Segundo, buscar la manera legal de buscarles las cosquillas a esos individuos acusándoles de atentar contra la libertad de expresión, la libertad de cátedra o algo similar.
Mientras no asumamos que a los fanáticos no se les puede dar la más mínima cancha, iremos para atrás como los cangrejos, con el riesgo de tirar por la borda siglos de lucha en defensa de los derechos humanos más elementales.
Como el Presidente de Australia les dijo hace poco a los musulmanes:
ResponderEliminar"si vienen bienvenidos son, pero deben adaptarse a nuestra cultura y vivir bajo nuestras leyes, así tendrán los mismos deberes y derechos, sino las puertas están abiertas para que se regresen a sus países de origen."
En España no es asi, parece que debemos acogernos a sus leyes y costumbres y cambiar nuestra sociedad para que ellos se sientan como en sus "casas", lo mejor es comenzar a adoptar cochinillos en vez de perros y sacarlos a pasear ocho veces al día. Si les molesta... ¡allá ellos y que se vuelvan a morilandia!