La realidad muchas veces resulta demasiado dura de digerir. Los que repiten, por activa y por pasiva, la mentira de que en Catalunya existe una crispación más que notoria, los que aseguran que las familias catalanas están rotas y nos hablamos ni en Navidad, los que dicen que el enfrentamiento entre unionistas y secesionistas -en realidad, los segundos, demócratas que queremos ejercer nuestro derecho a ser preguntados- es constante y la "crispación" se vive en plena calle... se han quedado con el culo al aire; ya que los hechos tristemente acontecidos ayer vienen a demostrar que si existe crispación y mala leche no es en estas tierras si no en la sede de su maravillo y limpio partido popular.
Partido en el que no se crispan, simplemente agarran un arma y se pegan tres tiros.
¿Indecente interpretación y utilización de un hecho deleznable?... Sí, es cierto, lo reconozco; tan indecente como la que hacen ellos con la inexistente "crispación" entre vecinos y familias catalanas.
La presidenta de la Diputación y del PP de León, Isabel Carrasco, murió ayer tarde al ser asesinada en las inmediaciones de su casa, en el Paseo de la Condesa de León, por la esposa e hija de un inspector jefe de la Policía Nacional destinado en Astorga (León).
Montserrat Triana Martínez, la hija, ingeniera de telecomunicaciones, fue despedida hace más de dos años de su trabajo en la Diputación, pero se le adeudaba una cantidad que la Diputación se negaba a pagar -eso dicen algunos medios- o se le reclamaban 12.000 euros que había cobrado de forma ilegal.
Fuese cual fuese la reclamación, hasta ahí se trata de un simple pero condenable delito común que será castigado con todas las de la ley, pero como a ellos les gusta politizar yo no voy a quedarme corta.
La madre -la que dicen disparó el arma- y la hija eran militantes afiliadas al PP, esta última hasta había formado parte de las listas en varias convocatorias electorales. Ambas, y desde hacía años, colaboraban estrechamente en el partido y eso me lleva a preguntar; ¿qué injustificable situación llevó a esa mujer a empuñar un arma y disparar?... ¿Locura transitoria después de dos años?... ¿12.000 euros?... Lo siento, no me lo puedo creer, en este macabro puzzle falta una pieza más.
Isabel Carrasco, la víctima, llegó a acumular gran cantidad de cargos públicos, y su gestión ha estado rodeada de numerosas polémicas. Ha llegado a ser acusada de amañar oposiciones, de pagar gastos personales con dinero público y de cobrar dietas por conceptos inexistentes. En su partido era conocida como "la mujer de los 13 sueldos". Especialmente controvertida fue su decisión de subirse el sueldo un 13%, lo que hizo con el apoyo del PSOE -¡vaya otros!-, en el 2011.
Por ahí dentro, me temo, debe andar la pieza del puzzle que falta.
Me gustaría que este triste suceso no tuviese connotaciones políticas y solo fuese un repugnante acto más de delincuencia común, pero me meto que no es así.
Este salvaje y frío asesinato ha dejado en evidencia es que entre algunos miembros del PP sí hay crispación, crispación de no sé que tipo, pero crispación al fin y al cabo, que unida a una enfermiza sed de venganza de madre e hija ha derivado en un injustificado y condenable asesinato.
Sres. del PP dejen de inventar estupideces y vigilen más lo que tienen entre sus filas.
E.P.D.
14/5/14 - Según publica la web "leonoticias.com", un periódico digital de Léon:
La "buena relación personal" que existía entre la líder del Partido Popular en León, Isabel Carrasco, y Montserrat Triana, militante de la misma formación, se rompió hace tres años y pasó a estar marcada por enfrentamientos "que dan de lleno en lo personal".
Tanto es así, que según una información que publica esa web "en León era sabido que Triana odiaba a Carrasco", sobre todo después de que la presidenta de la Diputación leonesa decidiera prescindir de sus servicios como colaboradora de la institución porque la "relación personal con su familia se había roto". Un despido, que según fuentes 'populares' citadas por la web, fue "personal y no profesional".
La familia no perdonó nunca el cese orquestado por Carrasco. Sin embargo, el odio no queda ahí. Y es que a pesar de que Triana Martínez se llevó una indemnización "muy importante", la líder del PP en León no estuvo conforme con dicha liquidación y la Diputación pleiteó por la misma hasta que la despedida tuvo que devolver 60.000 euros y perdió su piso, según fuentes del PP mencionadas por leonoticias.com.
La "truculenta historia" que se esconde tras el asesinato de Isabel Carrasco se complicó aún más con otro episodio personal que vincula al marido de la acusada, inspector jefe de la comisaria de Astorga, con la líder del PP. "Tenía una estrecha relación personal con Isabel Carrasco. Demasiado estrecha, dicen en el PP".
¡Menudo culebrón!... ¿Devolver el dinero de una indemnización?... ¿Lío de cuernos?... Lo lamento, sigo sin entender ni ver nada claro.